Historia
Los apellidos que en el siglo XXVIII llevaban los vecinos de
Lois eran: Rodríguez Castañón, Rodríguez
Canseco, Moñiz, Alvarez Acevedo, Alvarez Alonso, Valbuena,
Rodríguez, Alvarez, de la Oceja y González. Las
familias más poderosas eran los Rodríguez Castañón
y Alvarez Acevedo.
En 1755 el Concejo de Lois acepta el ofrecimiento
del Obispo de Tuy, D. Juan Manuel Rodríguez Castañón,
de levantar una nueva iglesia en el mismo lugar que ocupaba la
Parroquia de Santa María, cuyo estado era muy deficiente.
Los gastos de la nueva iglesia corrían íntegramente
por cuenta de este obispo, al que se cede la facultad de construir
la capilla del Pilar, que será propia del mayorazgo de
su casa. El pueblo debería colaborar aportando los materiales
(madera, piedra, arena, tejas, cal…) por parte de los vecinos,
y aquéllos que nos dispusiesen de bueyes para acarrearlos
deberían estar presentes para ayudar a cargar y descargar.
En 1764 concluyeron las obras y en la inauguración
celebrada el 8 de Septiembre estuvo presente el citado obispo,
que ya contaba con 70 años, además de numerosas
e importantes delegaciones de León, del arzobispado de
Burgos, del obispado de Tuy, y de todas las iglesias y pueblos
de los alrededores, tanto sacerdotes como población en
general.
La iglesia de Lois es singular tanto por su tamaño como
por sus características arquitectónicas. Ambos son
excepcionales en el entorno y ciertamente raros en un medio rural
tan alejado de las poblaciones importantes de la provincia de
León. Por sus peculiaridades, por su empaque, se le ha
dado el nombre de “Catedral de la Montaña”.
El aspecto rosado tan peculiar se lo da el mármol veteado
que procede de una cantera cercana, que también se ha utilizado
en el tiempo para edificar otras casas de las principales familias
del pueblo.
El edificio es rectangular, y la iglesia propiamente dicha es
de una sola nave, con planta de cruz latina de brazos cortos.
A ambos lados del presbiterio (del altar) hay dos sacristías
cuadraras iguales en su dimensión. El cuerpo de la iglesia
también tiene, paralelos a él, dos cuerpos rectangulares;
el del norte es un osario al que no se accede desde el interior,
mientras que el del sur es el atrio cubierto donde está
la puerta lateral. El fondo de la iglesia tiene un cuadrado a
cada lado, que son las torres. La simetría manda en esta
construcción, en la que se utilizó como unidad de
medida la vara (84 cmts). Las pilastras tienen una vara de ancho,
y la nave 8 varas de ancho y 14 de largo.
Aunque ha sido catalogada como neoclásica, su estilo pertenece
a una época de cambio y transición, a un barroco
tardío marcado por una cierta desnudez ornamental, pero
anterior al neoclasicismo que más tarde triunfó
en España. Estilo ajeno a los que en León fueron
dejando su impronta a lo largo de los tiempos.
El arquitecto que diseñó la iglesia fue don Fabián
Cabezas, maestro mayor de varias construcciones en Toledo y aparejador
de su catedral. El estilo de su obra es barroco, pero hay que
tener en cuenta que al morir antes de 1755, el maestro que llevó
a cabo la construcción probablemente despojó al
proyectote esos elementos originales, si es que los tenían.